Mi Rebotica nace de la unión de la pequeña industria cosmética y la oficina de farmacia. Surge como respuesta a un largo tiempo de trabajo en común, para intentar convertir la cosmética oficinal en cosmética a mayor escala al alcance de un público más extenso.
Los cosméticos preparados en la farmacia, si se han diferenciado siempre por algo ha sido, no sólo por la calidad de las formulaciones, sino también por la concentración de sus principios activos. En cosmética oficinal se formula a concentraciones máximas, por lo que podemos presumir de la efectividad de nuestras fórmulas.
El gusto por la calidad y el trabajo hecho con mimo de manera casi artesanal, como en las antiguas reboticas, junto con un respeto y admiración profunda por la naturaleza es lo que nos ha hecho decantarnos por activos 100 % naturales que nos devuelven a los orígenes de los preparados oficinales.
Nuestro mejor aval son las miles de pieles que hoy se cuidan en España con nuestros productos.